miércoles, 27 de enero de 2010

Sudores

Tu aliento cinemático se entrecorta al instante,
me separo
y mi mirada hemofílica se hacina en los bordes de tu figura semidifusa...
los trasudores y los elíxires de la carne de golpe se agolpan en la nariz
y una nueva gota de sangre nos une.
Tu mirada al infinito.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

como muchos líquidos coorporales, te mantienen unido a alguien...por siempre

zuurfer dijo...

...O te separan para siempre, dependiendo de la profilaxis de quien convive con ellos.
Saludos